Según datos de Nutritienda.com, uno de cada tres mayores en España tiene a su lado una mascota. De ellos, siete de cada diez opina que desde que comparte la vida con un animal sus niveles de estrés han disminuido. Y ocho de cada diez mayores que poseen un perro afirman sentirse más activos físicamente.
Para Noelia Suarez, directora de comunicación de Nutritienda, «Tener a un compañero de vida no solo mejora la salud, sino que también ayuda a combatir los sentimientos de tristeza y la soledad, especialmente las de los más mayores.»
Dicho esto, vamos a ver ya los 9 beneficios de las mascotas en nuestros mayores.
1. El mayor se siente más activo
Los animales de compañía contribuyen a que el anciano se sienta activo. Deberá darles de comer, llevarlos al veterinario o sacarlos a pasear.
2. Menor sensación de soledad
Cualquier mascota reducirá la sensación de soledad por estar presente en el domicilio todo el día. Si además es un animal con el que puedan interactuar, la sensación de compañía aumentará.
3. Los animales pueden ayudar a los mayores
Existen perros entrenados para ayudar a los mayores con problemas de movilidad. Pueden encender la luz, abrir puertas o recoger cosas que se hayan caído al suelo, entre otras acciones. También hay canes que pueden avisar de que suena el teléfono, el timbre de la puerta o una alarma. E incluso hay perros entrenados para ayudar a sus dueños en situaciones comprometidas, como una caída, una bajada de tensión o un ataque epiléptico.
4. Disminuye la tristeza y depresión
Está comprobado que tener una mascota reduce la sensación de tristeza de los mayores y disminuye los síntomas de depresión. Los animales suelen ser muy divertidos y crean situaciones graciosas que hacen sonreír a sus dueños, con quienes establecen fuertes lazos afectivos.
5. El estrés se reduce
La la relación con las mascotas contribuye a generar serotonina, un neurotransmisor muy relacionado con el control de las emociones y el estado de ánimo que disminuye los niveles de ansiedad y estrés.
6. Aumentan la autoestima
Uno de los problemas a los que se enfrentan las personas mayores es a la pérdida de responsabilidades. Cuidar de un animal volverá a hacerles sentir útiles y necesarios, lo que les ayudará a aumentar su autoestima.
7. Ejercitan la memoria
Cuidar de un animal implica recordar su alimentación, sus visitas al veterinario y sus compras de comida. Ayudará a mantenerle motivado a recordar y a mantener unas rutinas.
8. Ayudan a socializar
Los perros son los que más claramente ayudan a socializar, pues los paseos permiten la relación con otros dueños y con otros amantes de los perros, pero cualquier otro animal puede ayudar a iniciar una conversación al permitir tener un tema en común.
9. Mejoran la salud
En general, los animales de compañía reducen el insomnio y las pulsaciones, y aumentan el apetito. Hay estudios que los relacionan con una mejora de la presión arterial, la disminución de enfermedades cardiovasculares y el dolor articular y muscular. En cualquier caso, siempre mejoran el humor de sus dueños, lo que se traduce en una mejor calidad de vida.
Otras consideraciones
Es importante informarse sobre las necesidades de los distintos animales para que se adapten bien a la vida del futuro dueño. Hay que tener en cuenta el tamaño, los cuidados y el gasto que conlleva cada uno, para, por ejemplo, no elegir un perro activo para alguien con problemas de movilidad o un gato de pelo largo para alguien con problemas de motricidad que no le permita cepillarle adecuadamente. Si se toman esas consideraciones, los beneficios pueden ser mutuos.