Si el domingo publicaba un artículo sobre la Casa del lobo en Belmonte de Miranda, en Asturias (ver), hoy traigo una noticia sobre otro centro de interpretación del lobo ibérico, esta vez en Robledo de Sanabria, provincia de Zamora, una zona también muy lobera.
La figura del lobo atrae a cientos de turistas a pueblos de la zona norte del país, que de otro modo no serían visitados. Por eso están empezando a proliferar estos centros de interpretación.
Si en el post anterior criticaba el cercado de Belmonte donde mantienen a dos lobos sustraidos de una de las desgraciadamente famosas batidas de caza en Asturias, hoy es de justicia que me haga eco de un centro de interpretación que se ha esforzado por hacer las cosas bien.
El centro del lobo ibérico de Castilla y León abrió en el 2014 en el pueblo de Robledo de Sanabria, en Zamora. Hay varias salas donde muestran la fisiologia del lobo, con una piel y restos óseos para poder apreciar, por ejemplo, la diferencia de su mandíbula y la de un mastín;
la importancia de la ganadería y su relación con el lobo
y, lo más curioso, una sala que nos transporta al hogar de una cueva-cabaña, donde una proyección de actores en tamaño real nos contarán historias y leyendas sobre el lobo, tal y como debió ser en los pueblos loberos hasta no hace muchos años.
Y también tienen un «cercado» aunque en este caso no tiene nada que ver. Se trata de dos zonas valladas de 3 hectáreas cada una, con zonas arboladasy charca artificial, donde viven 7 lobos. El personal de la unidad de manejo del centro ha puesto especial esmero en intentar crear una estructura de pareja alfa como la que tendrían en libertad para evitar tensiones y luchas por el poder.
Esto es de suma importancia, y demuestra lo que hemos aprendido de las manadas de lobos en los últimos años. Todas las teorías jerárquicas del siglo pasado se basaban en grupos de lobos que no respetaban esa dinámica, por lo que las luchas intestinas eran frecuentes y por tanto los datos obtenidos, irreales.

Las manadas en libertad están compuestas por una pareja y sus hijos y familiares. En este caso, el macho alfa y tres de las hembras son hermanos y criados en cautividad por la fundación Senda viva. Otras dos hembras llegaron de forma diversa: una había sido claramente criada por algún humano que la tuvo en casa hasta que la dejó abandonada a las puertas del Centro de recuperación de Villaralbo y la otra fue recuperada del incendio de Castrocontrigo con múltiples lesiones, siguiendo en proceso de reintroduccion en la manada. Un segundo macho procede de Albacete y en el 2016 nació un nuevo ejemplar en sus instalaciones al que han llamado Robledo.
Robledo nació con un problema en una de sus patas que le hace llevarla encogida todo el rato, a pesar de los esfuerzos de los veterinarios de la Universidad de León. Aún así hace vida completamente normal.
Espero que todos estos centros sirvan, no solo para disfrute a aprendizaje de los turistas que se acerquen hasta allí, sino también para que el lobo sea considerado en esas zonas más valioso vivo que muerto, e incluso sea aceptado como posibilidad de crecimiento allí donde vuelve a aparecer después de muchos años ausente.